Yo ya no sé qué busco
Ya no sé qué busco porque no sé cuándo lo voy a encontrar. I mean, hace un año ya estaba listísima para mudarme el norte de país con una de mis mejores amigas (porque eso de no quedarnos en nuestras casas por mucho tiempo ya era parte de los planes). Ella también se fue al otro lado del mundo un tiempo, poco antes que yo lo hiciera. Creo que las dos desnidamos & queríamos seguir volando de lugar en lugar, hasta encontrar un hogar nuevo. Amo el hogar que tengo con mis papás pero al final del día es suyo & solo lo comparten conmigo & con mi hermano. Después de no sé cuánto tiempo entendí que la casa en la que vivo es de ellos, no mía & justo eso me hace buscar un hogar propio.
OK, me fui por otro lado, pero a lo que voy es que hace un año me veía mudándome a otro lugar, sola por segunda vez, viajando sola & acompañada. Visitando a un amor que al final no fue pero que estaría cerquita de mí. Muriéndome de calor pero yendo muy seguido a la playa. Viajando a California pa' vivir el sueño americano por una semana & siendo feliz en Disney. Cocinando camarones con mango, queso y chipotle (aún guardo la receta). Haciendo tours en uno que otro viñedo. Viajando mil horas en autobuses incómodos para llegar a lugares insuperables. Ay, ¡tantas cosas! De verdad sentí que se me fue un sueño de las manos & no fue mi culpa. A estas alturas, ¿a quién le echamos la culpa?
Todos los planes se despidieron de nosotros & no sabemos si algún día nos saludarán otra vez. Soy fan, fan, fan de planear cosas; incluso lo que estaré haciendo el siguiente año. Mis planes son muy puntuales. Ya hasta tengo en mente dónde estaré en 5 o 6 años. Tal vez esté mal, no sé... intento no aferrarme tanto a mis planes del futuro porque si no los realizo, se me van a ir las ilusiones. Y aunque ya sé qué haré los próximos años de mi vida, ahorita no sé qué busco. Sé que voy & vengo... & nomás no encuentro algo. Hago & deshago, & tampoco.
Personalmente, al empezar cuarentena tenía esta tonta idea de que iba a hacer de tooooooodo mientras estuviera en mi casa: ejercicio, perder peso, escuela, dar clases, pintar, leer, escribir, tomar mil cursos en línea, cocinar, tesina, ver mil series & películas, escuchar muchos podcasts & muchas más cosas. Me llené de tantas cosas que al final no hice ni una cosa bien. Creo que a finales de año me cayó el 20 de que realmente no era necesario saturarme física ni emocionalmente. ¿Para qué? ¿Se lo tenía que probar a alguien? ¿Me iban a dar algo de recompensa? Probablemente sí, en redes sociales, si presumía todo lo que había 'hecho' me iban a dar likes o comentarios (aunque en el fondo no me gustara). Y ahora, me da mil hueva subir algo a mis redes. Es que, ¿pa qué o qué? No entiendo para qué subir una foto, un post, un tweet. Ay, sueno bien mamona pero bueno, ésta es una de las tantas etapas que he tenido en el encierro & espero que me dure mucho rato.
No fui y no seré las exigencias intensas que me impuse. La vida sabe más rica cuando es tranquila. ¿Y qué creen? Ahora hago lo que nunca pensé: DAR clase a las 7 a.m. Aparte, escribo mi tesina, hago prácticas & tomo tres materias. Y todo lo estoy haciendo muy bien. No me tengo que exigir más.
Tchao!
Comentarios
Publicar un comentario